¿Qué se debe tener en cuenta para elaborar el proyecto de impermeabilización?
Superficie
Evaluación del tipo de superficie: determinar el material de la cubierta (hormigón, metal, madera, etc.) y su estado actual es fundamental. Las características de la superficie influirán en la elección de los materiales y métodos de impermeabilización.
Condiciones de la superficie: inspeccionar la superficie en busca de grietas, fisuras o irregularidades que puedan afectar la aplicación de los materiales impermeabilizantes. Es esencial reparar cualquier daño antes de proceder.
Desagües
Sistema de drenaje: asegurarse de que los sistemas de drenaje y desagües estén bien diseñados y en buen estado para evitar acumulaciones de agua. Un drenaje deficiente puede llevar a problemas de estancamiento y filtraciones.
Pendientes adecuadas: aunque las cubiertas planas tienen una inclinación mínima, es vital que esta pendiente permita un drenaje eficiente del agua. Revisar y, si es necesario, ajustar las pendientes para asegurar un flujo adecuado hacia los desagües.
Puntos característicos de las cubiertas
Juntas y petos: identificar y tratar adecuadamente las juntas, petos y otros puntos críticos de la cubierta. Estos son puntos vulnerables donde es más probable que ocurran filtraciones.
Puntos singulares: prestar especial atención a los remates (como chimeneas, conductos, ventilaciones y pilares) y los encuentros con otras estructuras. Utilizar selladores y materiales adecuados para garantizar una impermeabilización continua y efectiva.
Condiciones climáticas
Clima local: considerar las condiciones climáticas de la ubicación del edificio. Factores como la cantidad de lluvia, la exposición al sol, y las variaciones de temperatura influyen en la selección de los materiales.
Resistencia: asegurarse de que los materiales seleccionados sean resistentes a los elementos climáticos específicos de la región, incluyendo radiación UV, humedad y temperaturas extremas.
Materiales
Calidad de los materiales: seleccionar materiales de alta calidad y adecuados para el tipo de superficie y las condiciones específicas del proyecto. La durabilidad y la eficacia de la impermeabilización dependen en gran medida de la calidad de los materiales utilizados.
Compatibilidad de los materiales: asegurarse de que los materiales impermeabilizantes sean compatibles entre sí y con la superficie existente para evitar problemas de adherencia y efectividad. En ese sentido, hay que tener en cuenta que de entre todas las posibles problemáticas de incompatibilidad, la migración química es la que genera mayores problemas.
Mano de obra
Profesionales cualificados: contar con empresas experimentadas y cualificadas para garantizar una instalación correcta y duradera. Las habilidades del equipo de instalación son
cruciales para el éxito del proyecto, por lo que se recomienda la acreditación de la Asociación Nacional de Especialistas en Impermeabilización y que el equipo cuente con experiencia contrastada.
Certificaciones y normativas: verificar que los equipos de profesionales y los materiales cumplan con las normativas locales y las certificaciones necesarias para asegurar la calidad y seguridad del proyecto.